¿POR QUÉ MÚSICA? -– PARTE SIETE: Más Allá del Género por Frank Fitzpatrick
“Nuestra música es un puente donde la gente puede reunirse, bailar, amar y crear.” – Les Nubians
Cuando decidí fundar EarthTones hace unos años y centrarme más en el poder de transformación de la música y el cine para un cambio social positivo, realmente pensé que iba a alejarme de muchas áreas del negocio que me habían agotado o que estaban fuera de la alineación con mi visión del mundo. Había producido algunos artistas de Hip Hop bastante exitosos y bandas sonoras en ese momento, incluyendo Friday y In Too Deep, pero me imaginaba que iba a trabajar menos en proyectos como esos con mi nueva visión y compromiso. No me malinterpreten: los proyectos fueron hermosas experiencias y todos los artistas son buenas personas; sin embargo, el encanto de la naturaleza del negocio se iba poco a poco.
A menudo, el Hip Hop tiene connotaciones que no son compatibles conscientemente con el cambio social. Al parecer, los retos de la industria habían estrechado mi visión del Hip Hop también, pero mi viaje hacia adelante reveló una nueva perspectiva y bienvenida, junto con muchas otras revelaciones inesperadas. Entre más trabajaba alrededor del mundo, más descubría movimientos elevándose desde la cultura global del Hip Hop, infundido con mensajes de empoderamiento y unidad, expresada en todo tipo de formas musicales y adoptado por un sinnúmero de nacionalidades en todo el mundo.
Cuando estaba tratando de dejar el turbulento mundo del Hip Hop, sorprendentemente la vida me hizo regresar a ese camino. Fui reclutado para una campaña patrocinada por las Naciones Unidas para tomar conciencia de las víctimas discapacitadas de la guerra en el Medio Oriente. Ya que el público predominantemente era de edad de 25 años, el Hip Hop se escogió como género musical. He tenido el honor de colaborar con el altamente inteligente y consciente artista Árabe de Hip Hop, Rayess Bek, en una canción y un video musical transmitiendo mensajes de empatía y unidad a través de las 22 naciones de habla árabe. Ese proyecto fue seguido por otros, incluyendo una campaña de sensibilización sobre el SIDA para adolescentes en las escuelas del centro de la ciudad, y una película Forest Whitaker sobre el huracán Katrina - que implica una vez más la colaboración con artistas de Hip Hop. La tendencia es clara: el Hip Hop se convirtió en el movimiento cultural de música impulsado por muchos jóvenes en todo el mundo, convirtiéndose en uno de los canales de mayor alcance para apoyar la proyección social y el cambio de conciencia.
Todavía estaba bastante seguro que no tendría los dolores de cabeza de producir otra banda sonora de Hip Hop. Supongo que no había aprendido decir "nunca digas nunca". Cuando me preguntó mi querido amigo escritor/director Robert Adetuyi (Stomp the Yard) para crear una banda sonora para su película "Beat the World"- Un drama adolescente sobre equipos de baile que compiten para el premio de la Competencia Internacional de Danza Hip Hop, tuve que volver a examinar mis metas y visiones, y ser honesto de mis propias creencias y límites que me puedan impedir cumplirlos. La película de Rob era una historia positiva de superar retos y perseguir sueños. Filmada en cuatro centros culturales urbanos - Detroit, Berlín, Toronto y Río de Janeiro, la película no sólo trajo talento y perspectivas de todo el mundo, sino que se distribuye a audiencias jóvenes en más de 20 países. Tomé la película como una nueva oportunidad para cambiar los paradigmas sociales y de inspirar a los jóvenes a través de la música y el cine, y así ayudar a que brille una luz más positiva de la propia cultura mundial Hip Hop.
Como parte de mi viaje y mi continuo despertar, tuve la oportunidad de crear colaboraciones significativas entre las voces principales del cambio de varios países, entre ellos K'Naan (Somalia), KRS-One (EE.UU.), MV Bill (Brasil), Sway (UK) , Nneka (Nigeria), Bajah and the Dry Eye Crew (Sierra Leona), Talib Kweli (EE.UU.), Les Nubians (Francia), y Ziggy Marley (Jamaica). La música se fusionó con varios estilos y géneros musicales, sin embargo, todos bajo la mismo voz del "Hip Hop Global." Tal vez nuestra esperanza de romper barreras- tanto físicos como psicológicos, se resume mejor en la canción "Hip Hop Nation "cuando KRS-One y K'NAAN juntos proclaman:
“We´re gonna dance to the hall through the halls of freedom, tear down the wall - baby, we don´t need 'em." (Vamos a bailar a la sala a través de los pasillos de la libertad, derribar los muros - no los necesitamos.)
Ahora estoy trabajando en otra película centrada en la juventud, pero esta vez en China - uno de los nuevos epicentros de la revolución cultural que viene, y "Hip Hop" está en la mezcla de nuevo, como un canal para participar y unir a las audiencias de una causa.
Aunque los géneros musicales pueden ser útiles para ayudar a organizar nuestras librerías musicales, como cualquier etiqueta - racial, cultural, artística o espiritual, los géneros pueden limitar el potencial de permanecer abierto a otras visiones y a adquirir un mayor sentido de conexión personal. La mayoría de las formas musicales que se desarrollan en los movimientos culturales, se enfrentan a una fuerte resistencia, por lo menos al principio. En los años 40 y 50, por ejemplo, muchos estaban seguros de que América se iría a la perdición, etiquetando al Jazz como el diablo. En los años 50 y 60, Elvis y otros fueron arrestados por la realización de Rock and Roll - otra "música del diablo." El adviento y explosión del rock, junto con el aumento global de R & B, llevan mensajes de conciencia y el cambio en los años 60 y 70, creó más miedo en los corazones y las mentes de las fuerzas imperantes. El mismo John Lennon se encontraba en la lista negra de Estados Unidos, mientras artistas visionarios de todo el mundo estaban exiliados, incluyendo los fundadores del movimiento Tropicana en Brasil - Caetano Veloso y Gilberto Gil. En los años 80 y 90, en toda Europa, discotecas y "raves" fueron cerradas por la policía y los padres temerosos - ya que la tornamesa es un arma que temer. El Hip Hop fue etiquetado como el próximo enemigo del sueño americano - el arma musical de destrucción masiva que tendría que ser destruido y hacerse cargo de éste.
Milton Nascimento me contó una vez la historia sobre ir más allá de género. Nascimento se frustra cuando la gente trata de etiquetar su trabajo en un género musical - Samba, Jazz, Bossa Nova. Finalmente se sintió justificado cuando, un día en París, mirando al marqués de su concierto de aquella noche, él leía: "Esta noche: Miles Davis: 'Jazz' y Milton Nascimento: 'Milton'."
Si damos un paso atrás y echamos un vistazo a la historia de la música, ya sea si nos referimos a Jazz, Rock o Hip Hop de los años 60, se puede observar que estamos hablando de mucho más que un género musical. Más allá de las etiquetas, éstos son movimientos globales que han proporcionado el marco social y cultural para cambiar los paradigmas y unir a la gente para el cambio positivo. No me malinterpreten, yo todavía me comunico con los demás por medio de etiquetas, sin embargo, trato de enfocar mi propia mente y trabajar en romper viejos paradigmas limitantes que nos separan unos de otros - no sólo a los musicales, sino también los utilizados para la raza, política, religión y la cultura. La música tiene el poder innato de cruzar todas las barreras, aun cuando nada más puede hacerlo.
Música de cualquier género sigue siendo música, y la gente alrededor del mundo sigue siendo ser humano. En lugar de discriminar géneros enteros, o movimientos que no son de nuestro agrado, o estereotipar culturas enteras, vamos a enfocarnos en utilizar la música - toda la música - para saltar los estereotipos, derribar las barreras sociales y juntar a la gente de todos los ámbitos para respetar los valores de paz, libertad de expresión, empatía y el respeto mutuo.